Tomamos medidas para reducir las desigualdades de acceso a la salud

Esta semana, se celebra la Semana de la Salud Materna de las Mujeres de Color, que implementó hace cinco años la Black Mamas Matter Alliance y fue oficialmente reconocida por la Casa Blanca a partir de 2021 en el marco de una iniciativa para fomentar acciones concretas orientadas a la equidad en la salud maternal.

Hace un año, Blue Cross Blue Shield Association se impuso la ambiciosa meta de disminuir en un 50 % las desigualdades raciales en el ámbito de la salud materna, en un plazo de cinco años. Durante los últimos 12 meses, dimos a conocer diez perspectivas para descubrir nuestro futuro trabajo e impulsar medidas similares en todo el sistema de la salud materna.

Lo que hemos descubierto

En EE. UU., el índice de mortalidad materna aumentó abruptamente en 2020, durante la pandemia de COVID-19. Las mujeres de color corren un riesgo tres veces mayor al de las mujeres blancas de morir por complicaciones del parto y se enfrentan a un riesgo 70 % mayor de sufrir morbilidad materna severa (SMM), o situaciones potencialmente letales, en comparación con otros grupos raciales, lo cual suele deberse a afecciones que requieren de mucha atención durante el embarazo de una mujer.

Esas desigualdades se evidencian no solo en los niveles educativos, el estatus socioeconómico, en los indicadores geográficos y etarios, sino también en problemas más arraigados, como afecciones crónicas subyacentes, desigualdades raciales y prejuicios dentro del sistema de atención médica que deben abordarse sistemáticamente y a lo largo de toda la vida de las mujeres, no solo durante la etapa del embarazo.

Es necesario implementar medidas concretas, orientadas a combatir las barreras culturales, operativas y estructurales que han causado las desigualdades de la actualidad, al tiempo que luchamos contra las disparidades en la salud materna. Esto es lo que sabemos hasta el momento:

• La atención médica materna debe enfocarse en las particularidades de cada cultura y ser competente: los prejuicios implícitos, junto con la falta de respeto y el desconocimiento de otras culturas, generan un impedimento para la confianza en la relación del proveedor con el paciente. Esto no solo profundiza las disparidades mencionadas sino que arriesga la efectividad de la atención médica materna.
• Los datos son fundamentales para medir el impacto: existen graves carencias en los datos sobre equidad de la salud disponibles. Sin acceso a los datos correctos, o a los estándares de uso, es difícil cuantificar las disparidades e incluso más difícil combatirlas.
• La atención posparto es vital en el marco de la atención médica materna: para combatir las desigualdades en el ámbito de la salud materna, es fundamental que reconsideremos la atención médica materna en todos sus aspectos, especialmente, en lo relativo al período posparto.

Diez medidas para avanzar hacia la equidad en la salud materna

A partir de las acciones implementadas por las compañías de BCBS, hemos identificado 10 medidas en concreto que las organizaciones pueden adoptar para optimizar la salud materna y reducir de manera cuantificable las desigualdades de acceso a la salud:

1. Dar participación a las madres y personas de la comunidad afines a esta situación en la creación, el desarrollo y el mantenimiento de un programa de salud materna integral. Crear asociaciones públicas y privadas para abordar las causas de las disparidades, las desigualdades y los determinantes sociales de la salud.
2. Brindar acceso a capacitaciones sobre respeto cultural y discriminación no consciente, orientadas a todos los participantes de la atención médica materna.
3. Incluir parteras enfermeras y centros de maternidad en las redes de proveedores, y crear programas orientados a optimizar la educación y la concientización en los miembros.
4. Facilitar el acceso a doulas y trabajadores sanitarios de la comunidad en los servicios de asistencia materna.
5. Implementar modelos sencillos de autogestión y atención prenatal con apoyo de pares, como CenteringPregnancy^TM.
6. Expandir la cobertura de beneficios para garantizar la atención posparto, incluyendo atención de salud conductual durante un año después del parto.
7. Alinear la medición de la calidad con lo estipulado por las organizaciones rectoras de estándares y establecer su conexión con los programas de calidad para proveedores.
8. Unirse a y participar en una Colaboración de Calidad Perinatal.
9. Implementar contratos que favorezcan una excelente relación precio-calidad en la salud materna.
10. Aumentar el alcance de programas de importancia especial como los de vacunación con enfoque en el COVID-19 y la gripe.

Una de las acciones que las compañías de BCBS están poniendo en práctica para implementar estas medidas es asociarse con March of Dimes y otras organizaciones locales para ofrecer capacitaciones enfocadas en la discriminación implícita y la educación, con la posibilidad de llegar a casi 1.7 millones de proveedores en las redes de BCBS. Brindar acceso a capacitaciones sobre respeto cultural y discriminación implícita puede ayudar a quienes se desempeñan en el ámbito de la atención del paciente a reconocer sus propios prejuicios y también a abordar la discriminación sistémica que existe a nivel de la organización. Las desigualdades pueden manifestarse de muchas maneras y todos somos responsables y debemos actuar independientemente de la industria o del sector.

Si bien cada una de estas 10 medidas representa el trabajo que las compañías BCBS priorizan, instamos a otras organizaciones y a otros líderes a descubrir la manera de implementar esas medidas en sus ámbitos de trabajo.

Un llamado a la acción renovado

Nosotros solos no podemos incidir de manera palpable sobre las desigualdades de salud que en la actualidad afrontan las mujeres de color. Además, si hay algo que nos ha enseñado la pandemia es que no podemos resolver los problemas del sistema de manera aislada, en especial cuando hay vidas en juego.

Instamos a los líderes de los sectores público y privado a adoptar estas 10 medidas, y también a los defensores de las madres de todo el país mediante un plan de acción y asociaciones:

• El congreso debe aprobar el paquete Momnibus de Black Maternal Health Caucus, el cual toma medidas para mejorar los resultados en la salud de las mujeres embarazadas y madres de color, sus bebés y familias. 
• Los estados deben adoptar la cláusula de la American Rescue Plan Act, la cual da la opción de extender la cobertura de Medicaid de 60 días a un año completo después del parto, lo cual puede incidir positivamente sobre el 43 % de todos los nacimientos en los Estados Unidos cubiertos a través de Medicaid.
• Los profesionales y proveedores de atención médica deberían trabajar conjuntamente con organizaciones que ofrezcan capacitaciones sobre discriminación implícita y respeto cultural, similares a las iniciativas que las compañías de BCBS y March of Dimes llevan adelante.

Con optimismo, pero también con la seriedad que el tema requiere, instamos a los responsables de la elaboración de políticas, las compañías aseguradoras, los empleadores, los grupos hospitalarios y los consultorios médicos a trabajar en pos de una visión común: la de brindar una atención más segura y justa a todas las madres.